A fines de septiembre y a propuesta le la Confederación de Empresarios Privados, algunos partidos políticos y el vespertino “Ultima Hora”, el gobierno decidió convocar al parlamento elegido en 1980. Desde el punto de vista de 1a UDP la situación era paradójica, pues si por una parte era evidente que el congreso elegiría a Hernán Siles, por otra no era menos cierto que una eventual elección en ese momento le podía dar una cómoda mayoría absoluta que en ese congreso no tenía.
Lidia Gueiler nació en Cochabamba el 28 de agosto de 1921. Desde muy joven militó en el MNR, partido del que fue destacada dirigente femenina. Organizó en 1951 una huelga de hambre en protesta por la anulación de las elecciones que había ganado Paz Estenssoro. Fue cónsul en Alemania Federal y representante de Bolivia ante la Comisión Interamericana de Mujeres. Fue diputada en las legislaturas 1956-1960 y 1960-1964. En 1963 se unió al PRIN de Juan Lechín y militó en ese partido hasta los años setenta en que se separó con una fracción propia y volvió a aliarse con Paz Estenssoro. Diputada de la Alianza del MNR en 1979 fue elegida presidenta de la cámara de diputados y en esta condición Presidenta constitucional interina de la república cuando tenía 58 años. Derrocada por García Meza fue exiliada del país. En 1982 fue nombrada embajadora en Colombia. En 1989 se unió a la Nueva Mayoría del MIR y fue elegida senadora y embajadora en Venezuela. En 1993 se retiró a la vida privada.
Gobierno Gueiler 1979-1980
El 16 de noviembre comenzó el gobierno de la señora Gueiler, la primera mujer que accedió a la presidencia del país. La Presidenta tampoco contó con el apoyo del parlamento que la había ungido y que, a pesar de la dramática situación que había experimentado, insistió en dejar librado a su suerte al gobierno que había designado. Esto obligó a Gueiler a apoyarse en la coalición de la que formaba parte (la alianza del MNR) con la que formó gabinete junto a un grupo de independientes. Por primera vez después le siete años un gobierno enfrentó la situación económica. Las medidas, bajo la batuta del ministro de Finanzas Augusto Cuadros Sánchez, fueron la devaluación del peso de 20 a 25 por dólar, el incremento del precio de los carburantes y ajustes a los precios de transporte y algunos alimentos básicos de la canasta familiar. Las medidas fueron respondidas con la huelga de la COB y el bloqueo de caminos de los campesinos. En diciembre la situación social parecía insostenible, tero el ejecutivo capeó el temporal y logró paliar una crisis económica que continuaba su curse ineluctable desde 1977.