La apertura democrática de principios de los ochenta tuvo dos características, la recuperación total de libertades ciudadanas y la imposición de un modelo de economía abierta. El primero en el gobierno de Siles y el segundo en el de Paz Estenssoro. El desarrollo de ambos conceptos se apoyó en una democracia de pactos surgida tras la crisis de gobernabilidad de la UDP. Ante la imposibilidad de ningún candidato de lograr el 50 % más uno de los votos por más de veinte años, se impuso la lógica de lograr acuerdos entre los partidos mayoritarios para tener mayoría congresal y cogobernar.
La idea de la existencia de tierras al otro lado del océano Atlántico se remonta a la antigua época de Platón, en Grecia, habla de la Atlántida situada más allá de las columnas de Hércules (Gibraltar). Estas ideas fructificaron a través de la Edad Media en varios países, dando lugar a extrañas teorías formuladas por los estudiosos y científicos de los siglos medios. Los comentadores árabes pusieron de moda en Europa la Geografía de Ptolomeo, el célebre geógrafo de Alejandría, el mismo que enseñaba la existencia de territorios poblados y ricos en el África legendaria, así podemos citar la Guinea y el Río de Oro (Costa de Oro).
Otra corriente, ya europea, puso de manifiesto la existencia y la cultura de vastos imperios en Catay (China) y Cipango (Japón). Los viajes del veneciano Marco Polo a estas regiones (fines del siglo XIII) descubrieron, a los ojos europeos, las riquezas que esos lugares encerraban. Se hizo firme el concepto de las islas de la Especería (Java, Borneo, Sumatra, etc.) y se establecieron contactos con estas partes del mundo mediante el paso por tierra a través del Asia Menor, Persia, India, etc.
También desde la antiguedad se sustentaba la idea de la redondez de la tierra. En el renacimiento, el cosmógrafo Florentino Toscanelli hizo varios cálculos basados en la redondez de la tierra, que influyeron de gran manera en Colón. Según este estudioso el radio de la tierra era inferior al verdadero y la distancia a las islas de Occidente relativamente corta, hecho que animó a Colón en su empresa.