Al terminar la conquista sólo existía la clase de los vencedores, o sea los hidalgos, soldados y encomenderos y la de los vencidos, o sea el pueblo indígena. Pronto, por táctica y aun por conveniencia, los españoles reconocieron a las antiguas autoridades incaicas y aimaras dándoles los mismos privilegios que tenían los españoles nobles. Así subsistieron bajo la tutela española los incas principales, los caciques regionales, los mandones etc.; todos ellos eran objeto de atenciones y se les rendía homenaje al igual que a los españoles.
En 1556, el virrey Andrés Hurtado de Mendoza, Marqués de Cañete, recibió la noticia de la existencia de una zona sin colonizar, al otro lado de las llanuras, al sudoeste de los Charcas y dentro de su jurisdicción. Con la intensión de poblar estas tierras encarga una expedición al capitán don Andrés Manso Sierra de Leguízamo, quien había estado anteriormente en Potosí y Charcas.
Hizo su entrada este conquistador por la denominada ruta de Tomina con el propósito de poblar toda la región comprendida entre los ríos Paraguay, Pilcomayo y Bermejo. Fundo entre el Parapeti o condorillo, una población con el nombre de Nueva Rioja, en un tolderio de chiriguanos.
Siguiendo sus conquistas se encontró con gente de Chávez, que estaba dispersa por esas regiones después de la Fundación de Santa Cruz. Grande fue la sorpresa de los dos capitanes y hubo una larga disputa entre ellos legítima. Manso se quedó en las tierras disputadas, mientras Chávez partía para Lima acompañado por Hernando Salazar y por Andrés de Cañizares como representante de Manso.
Llegado Chávez a Lima, se cocontró con que el virrey era pariente de su mujer. Gracias a este parentesco, el capitán obtuvo para sí los favores que solicitó. El virrey nombró gobernador de Moxos a su hijo García Hurtado de Mendoza, que también llegaría a ser virrey del Perú, iba como su lugarteniente Ñuflo de Chávez.
Está situación histórica llevó al historiador Humberto Vázquez Machicado a decir: El Collasuyo incaico y la gobernación de Ñuflo de Chavez, vienen a soldarse en ese año de 1560 y formar un solo bloque alrededor del núcleo central de Potosí , Charcas, para formar una sola conciencia de formar la que llegaría a ser la República de Bolivia.
En julio de 1560 Chávez, después d e haber reforzado sus tropas, regreso a la Barranca; allí dejo una fuerza de custodia continuando su expedición a cincuenta leguas al este de La Barranca Chávez fundo la ciudad de Santa Cruz de la Sierra el 26 de febrero de 1561 y el 20 de abril del siguiente año se hizo el repartimiento de naturales.