La sociedad Virreinal

De los cuatro virreyes que gobernarón el Perú en el siglo XVII el más el importante para el Alto Perú fue fue Don Pedro Fernández de Castro Conde de Lemus Nombrado Virrey en 1666 llegando acompañado con su esposa Doña Ana De Borja.

Al llegar el Conde de Lemus se encontró con el problema de la insurrección de Laicacota, no resuelto por su antecesor ni por la Audiencia de Lima. Para solucionarlo se embarco hacia Arica y desde allí paso a Paucarcollo. Sofoco la rebelión y se fue luego a Copacabana e 1668, visito toda la provincia después de la pacificación, reasumiendo el gobierno en 1669. Se preparaba para celebrar la canonización de Santa Rosa de Lima y San Francisco de Borja, cuando lo sorprendió la muerte a los 32 años en 1672. Fue nombrado muy devoto y gran protector de la Compañía de Jesús.

El vigésimo virrey del Perú fue Baltasar de la Cueva Enríquez que gobernó entre 1673 y 1677. Hombre muy estricto en materia económica, tuvo desavenencias con los comerciantes y el consulado del mar por sus severas ordenanzas contra la corrupción.

Mediante real orden el gobierno paso a Don Melchor de Liñán y Cisneros ocupo el cargo de Obispo, tres años después fue designado virrey , durante su gobierno llego la célebre recopilación de las Leyes de Indias. En 1681 comenzó a producir oro en una las minas al costado del Illimani, y fue la cantidad de oro recogido, que bajo la cotización de este metal.

El Duque de la Plata Don Melchor de Navarra y Rocafull (1680-1689), la planificación de la Casa de Moneda de Lima que se opuso a la de Potosí y el primer intento de supresión de la mita.

El último virrey del siglo XVII fue Don Melchor Portocarrero Conde de la Monclova quien ocupo el cargo y murió en su desempeño.

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Todas las sublevaciones ocurridas en la ciudad de Oruro tuvieron un carácter especial, pues en ellas los criollos y mestizos se adhieren prontamente a todo levantamiento indígena. Esto preocupo a las autoridades, sobre todo cuando se enteraron de los levantamientos de Túpac Amaru y Túpac Katari. Estos antecedentes, eran graves, sobre todo si se tiene en cuenta el estado económico de esta urbe minera, cuya franca decadencia había creado un clima de descontento y hostilidades.

Los indios volvieron a tomar posiciones y, por consejo de Andrés Túpac Amaru, intentaron el mismo golpe que en Sorata: construir un dique para inundar la ciudad, pero, felizmente para sus habitantes, el dique reventó antes de lo previsto sin causar el daño esperado. No tuvieron los sitiadores tiempo de hacer otro ni madurar un nuevo plan, pues los Virreyes de Lima y Buenos Aires se habían puesto de acuerdo y venían con tropas desde ambas partes a defenderla ciudad.

Andrés Túpac Amaru, después de la ejecución de su tío inca José Gabriel, conquisto toda la provincia de Larecaja, sitiando luego el pueblo de Sorata. Tres meses duró el asedio sin que sitiadores ni sitiados cedieran. Los sorateños fueron intimados a la rendición, cuando ya estaban extenuados por falta de víveres. La resistencia de los vecinos fue heroica, hasta costarles la vida. Túpac Amaru ingeniosamente hizo que durante el sitio sus tropas se ocuparan de construir un dique que fue desbordado, arrasando la población y ahogando a la mayor parte de sus habitantes, el 5 de agosto de 1781.... leer mas...

Nace el pueblo de Ayo Ayo, provincia de Sicasica, pertenecía a la masa indígena y toma su nombre, combinando los de los más grandes caudillos de la rebelión. Apaza era analfabeto y tenía muy poca preparación. A veces lo han tratado de impostor alegando que se había erigido jefe en forma arbitraria y con nombre supuesto; sin embargo, el Presidente de la Audiencia de Charcas, Ignacio Flores, por testimonio de la mujer de Túpac catari, nos dice que el caudillo estuvo dos veces en Tungasuca hablando con Túpac Amaru.

Uno de los mayores focos descontento estaba en Chyanta, allí desarrolla su labor el cacique Tomás Catari, quien estaba en comunicación con Tupac Amaru. Era fácil de comprender por qué esta región fue uno de los centros más importantes del levantamiento si tenemos en cuenta la cercanía de Chayanta a las minas de Potosí a donde se envía mitayos para trabajar en el Cerro Rico.

José Gabriel Condorcanqui, descendiente de Tupac Amaru (el inca que hizo ajusticiar el virrey Toledo, decidió restablecer el incario ; no en un régimen semejante al antiguo Imperio del Sol, sino en uno que, manteniendo la monarquía de los aborígenes, sustituyera al español. Tenía pensado proclamarse inca o rey y que bajo su autoridad se mantuvieran cuatro virreyes.

El año de 1780 todo el Bajo y Alto Perú se hallaba levantado; la causa, que dieron los su-blevados como razón inmediata, fue el nuevo impuesto de aduana contra el cual se levantaron Arequipa y Cuzco y en Charcas La Paz, Cochabamba y la sede de la audiencia. El grito de rebelión fue "Viva el Rey y muera el mal gobierno". En La Paz es donde este alzamiento tuvo mayores alcances; a media noche del 12 de marzo de 1780 tocaron a rrebato todas las iglesias de la villa, congregándose dos mil hombres.