Generalidades de la cara
El conjunto formado por los diversos huesos de la cara constituye un macizo óseo de forma prismática triangular, cuyas tres caras se dividen en dos antero laterales, que presentan el saliente nasal, el orificio anterior de las cavidades nasales, las arcadas alveolares, la sínfisis mentoniana, el tubérculo mentoniano, lateralmente el piso de la órbita, ,el agujero infraorbitario, la fosa canina, el agujero mentoniano, la cara lateral del hueso cigomático una posterior, que presenta los orificios posteriores de las cavidades nasales las coanas
Cavidades de la cara
El macizo facial está ahuecado por un gran número de cavidades. Se cuentan siete cavidades principales. Una sola de ellas es impar y media y se halla solamente en relación con los huesos de la cara: es la cavidad bucal. Las otras son laterales, pares, y están limitadas a la vez por los huesos de la cara y de la base del cráneo, Estas cavidades son: las cavidades nasales, las cavidades orbitarias y las fosas infratemporales (pterigomaxilar), estas últimas se encuentran lateralmente a las apófisis pterigoides, posteriormente a la tuberosidad del maxilar, inferiormente a las alas mayores del esfenoides.
Cavidad bucal. La cavidad bucal no tiene en el esqueleto pared posterior ni pared inferior. Está limitada anterior y lateralmente por la mandíbula y por las arcadas alveolodentarias, superiormente por la bóveda palatina o techo de la cavidad bucal, formada anteriormente por las apófisis palatinas de los maxilares superior y posteriormente por la lámina horizontal del palatino.
Cavidades nasales (fosas nasales): Se sitúan a cada lado de la línea media, situados medial mente a las cavidades orbitaria, superiormente a la cavidad bucal, inferiormente al cráneo., estudiamos cuatro paredes: medial, lateral, superior, inferior. Constitución de la pared lateral de las cavidades nasales. Seis huesos constituyen esta pared: cara medial del maxilar, apófisis pterigoides del esfenoides, hueso lagrimal, lámina perpendicular del palatino, concha nasal inferior, los laberintos etmoidales
- Pared superior o techo. Esta pared está formada, de anterior a posterior, por los huesos nasales, la espina nasal del frontal, la cara inferior de la lámina cribosa del etmoides y la cara anterior e inferior del cuerpo del esfenoides, la espina nasal del frontal participa en la constitución del techo de las cavidades nasales mediante sus caras posterolaterales.
- Pared inferior. O suelo está constituida anteriormente por la apófisis palatina de los maxilares, y posteriormente por la lámina horizontal de los palatinos.
- Pared medida o tabique de las cavidades nasales. El tabique de las cavidades nasales comprende tres piezas esqueléticas: dos óseas, el vómer y la lámina perpendicular del etmoides, y una cartilaginosa, el cartílago del tabique.
Cavidades orbitarias. Son laterales a las cavidades nasales, se encuentran superiormente a los maxilares, se encuentra inferior a la base del cráneo, tiene la forma de una pirámide cuadrangular de vértice anterior y base superior.
Constitución de la órbita. La órbita presenta cuatro paredes; superior, inferior, medial y lateral.
- La pared superior o techo de la órbita está constituida por la porción orbito nasal del frontal en la parte anterior y por el ala menor del esfenoides posteriormente.
- La pared inferior o suelo de la órbita está formada por tres huesos. La cara orbitada de la apófisis cigomática del maxilar ocupa los dos tercios o tres cuartos mediales de esta pared; la apófisis frontal del hueso cigomático es lateral al maxilar, en la parte antero lateral del suelo de a órbita; por último, la apófisis orbitaria del palatino ocupa, posteriormente al maxilar, la extremidad posterior o vértice de la pared inferior de la órbita.
- La pared medial se compone de cuatro piezas óseas que son, de anterior a posterior el segmento de la apófisis frontal del maxilar, posterior hueso lacrimal, la lámina orbitaria del etmoides, y el segmento anterior de la cara lateral del cuerpo del esfenoides.
- La pared lateral está formada, en los dos tercios posteriores de su extensión, por la cara orbitaria del ala mayor del esfenoides, y se completa anteriormente con la apófisis frontal del hueso cigomático, así como con la apófisis cigomática del frontal y la parte colindante de la fosita lacrimal del frontal.