Existen aproximadamente 200 huesos, sin considerar los huesecillos del oído, los sesamoideos ni los wormianos.
El esqueleto constituye el pilar o armazón del cuerpo sobre las cuales se encuentran tapizando los músculos.
El esqueleto está formado por: una columna vertebral o raquis, sobre la cual descansa los huesos de la cabeza, Inferiormente se articula a los huesos iliacos por medio del sacro, formando la cintura pelviana.
La cintura torácica formada por dos huesos la clavícula y la escápala u omoplato, que se articulan por fuera a la extremidad superior y por dentro a la caja torácica.
Los miembros superiores que se conectan con la pared torácica por medio de la cintura escapular.
Los miembros inferiores o pelvianos se conectan con la cintura pelviana por medio del hueso iliaco.
Se denomina pelvis al conjunto de los huesos articulados entre los dos iliacos y el sacro en la parte intermedia.
El hueso Hiodes es el único que se encuentra distante, sin articularse a otro hueso, situado en la parte anterior del cuello.
Clasificación de los huesos
Tomando en cuenta las dimensiones de longitud, anchura y espesor se dividen en tres grupos:
- Los huesos largos son aquellos en los que predomina la longitud sobre las demás.
- Los huesos cortos son aquellos en los que las tres dimensiones existen en forma equilibrada.
- Los huesos planos son aquellos en los que predomina la anchura sobre las demás.
Las eminencias y cavidades de los huesos pueden diferenciarse en:
Eminencias y cavidades articulares: por medio de las cuales los huesos se unen entre sí, Ej. Cavidad glenoidea del omoplato, que se articula con la cabeza del humero.
Eminencias y cavidades no articulares: tienen una forma diferente y se designa como apófisis, tuberosidad, tubérculo, espina, cresta o línea. Las cavidades no articulares tienen por objeto aumentar la superficie de inserción de un tendón o músculo. Ej. Fosita digital del fémur. Otras cavidades son de forma de escotaduras, agujero, canal, conducto, etc. dan paso a vasos y nervios.
Otras son divertículos como la de las fosas nasales, caja del tímpano, cavidades sinusales y mastoideas.
Agujeros vasculares de los huesos
Existen en tres categorías: Agujeros nutricios de primer orden: localizados generalmente en la parte media de los huesos. Ej. Diáfisis de los huesos largos. Agujeros nutricios de segundo orden: localizados en las epífisis de los huesos largos, ángulos de los huesos planos. Agujeros nutricios de tercer orden: localizados en la superficie no articular de los huesos, son de menor calibre que los demás.
Para encontrar los agujeros nutricios de prior orden en los huesos largos se interpreta la siguiente frase de TESTUT: “Ganan el codo y se alejan de la rodilla”.
Constitución de los huesos
Hueso compacto: forma la parte periférica de un hueso.
Hueso esponjoso: se encuentra dentro el tejido compacto, formado por láminas óseas, llamadas trabéculas.
La cavidad medular: que se encuentra atravesada por finas trabéculas óseas, se encuentra en esta parte la medula ósea roja y amarilla, donde se forman los elementos formes de la sangre.
En los huesos planos existen dos huesos compactos llamadas tabla externa y tabla interna, entre ambas se dispone el tejido esponjoso llamado diploe.
Los Huesos cortos se componen de una delgada capa de tejido óseo compacto, que rodea al tejido óseo esponjoso.
Un hueso largo presenta las siguientes partes:
- Un cuerpo llamado Diáfisis.
- Dos extremidades llamadas Epífisis Proximal y Distal.
- La Metafisis, es el segmento de transición entre la diáfisis y epífisis, sitio donde se encuentra el cartílago de Crecimiento.
Periostio. Es una membrana fibrosa y blanquecina que tapiza los huesos exteriormente, excepto las superficies articulares, Su adherencia es mayor en los huesos cuanto más irregular es la superficie ósea. Su función esencial es que contribuye al crecimiento en espesor del hueso, además la vascularización del hueso.
Osificación de los huesos.
Los huesos se desarrollan en el tejido conjuntivo, por dos mecanismos:
- Osificación fibrosa: pertenecen a este tipo de osificación los huesos de la cabeza, motivo por el cual se les denomina también huesos de membrana.
- Osificación Cartilaginosa o endocondral: pertenecen a este tipo de osificación los huesos de las extremidades superiores e inferiores, los cuales se osifican de acuerdo a Centros de osificación primario, que se sitúa al inicio del desarrollo en la parte media de la diáfisis, de donde a medida que avanza la edad se disemina al resto del hueso. los Centros de osificación secundarios, aparecen más tarde y forman ciertas apófisis en las epífisis.
Cartílagos de crecimiento: Existen dos cartílagos de crecimiento en hueso largo:
- Cartílago de crecimiento proximal.
- Cartílago de crecimiento Distal.
Son franjas de tejido cartilaginoso que se encuentran situados en la metafisis de un hueso largo, y contribuyen en gran manera al crecimiento en longitud de un hueso largo.
Para deducir cuál de los dos cartílagos de crecimiento es más Fértil o Epífisis Fértil, se interpreta la siguiente frase: “Se aleja del codo y se acerca a la rodilla”.