El gobierno de Gutiérrez Guerra vivió en la zozobra permanente.
El 24 de enero de 1899 en Cosmini, Pando gran estratega militar, derrotó a Alonso en la llamada batalla del primer crucero (en Chacoma donde hacen cru los caminos a Luribay y a Ayo ayo), 250 efectivos de los batallones Abaroa y Vanguardia avistarón un convoy constitucional con pertrechos a cargo del escuadrón Sucre. El intercambio de dispar os concluyó con la violenta explosión de un carro cargado de munición que precipitó la fuga y derrota de los alonsistas.
Los heridos en el combate de Cosmini se quedaron en Ayo Ayo. Al atardecer, más de un centenar de comunarios rodeó el pueblo, tomó la plaza principal y asedió a los heridos refugiados en el templo. En la noche los indios tomaron la iglesia y asesinaron en medio del alcohol y la violencia a todos los chuquisaqueños y a un par de vecinos del pueble. En esta tragedia murieron 27 soldados y el capellán, Fernández de Córdoba. Mariano Baptista, indignado escribió en Sucre el libelo Lugentes Campi (campo del dolor), un manifiesto demoledor y fuertemente racista contra los aimaras.